2ºFase La Olfativa
La fase olfativa es
donde la cata del vino se convierte en un arte algo más complejo.
Para entender su importancia en la cata hay que saber que el olfato
es el sentido que reconoce y clasifica las sustancias volátiles de
un vino.
Se aproxima la
nariz a la copa sin moverla para comprobar de manera global que no
hay aromas desagradables y extraer los aromas más sutiles.
A
continuación se balancea la copa
para agitar el vino porque es así como se desprenden los componentes
aromáticos.
Al remover la copa
sosteniéndola por su pie, los aromas del vino se airean, y es este
el
momento de acercar la nariz intentando reconocerlos.
La primera
sensación notable, y la más fácil de explicar es la intensidad
aromática.
El paso siguiente
es observar la limpieza aromática, es decir su nitidez desde la
ausencia de defectos.
Para el final, se
realiza el ejercicio más espectacular: la identificación de los
matices
aromáticos.
Se suele proceder
identificando un olor: la frambuesa, la vainilla, la rosa u otros.
El olor de un vino
realza su sabor, y viceversa. En el juego entre ambos encontramos la
armonía y el equilibrio, cuando los hay. Porque otras veces, lo que
se produce son interferencias.
No hay comentarios:
Publicar un comentario